Sábado 8:00 de la mañana, Zaragoza se despierta poco a poco, yo ya llevo un rato dando vueltas por casa, hasta que se ha hecho la hora, me vienen a buscar a casa, y casualmente en un coche rojo burdeos, esto seguro que significa algo.
Nos dirigimos hacia el nororeste, tras un par de horas llegamos a nuestro destino a Laguardia en La Rioja Alavesa. Tras girar a la izquierda en un desvío, de repente y sin esperarlo, aparece delante de mis ojos la silueta ondulada, reflejando los rayos del sol, allí esta, la bodega Ysios. Construida por Santiago Calatrava, el edificio en el cual se encuentra la bodega es suficiente para justificar la visita a esta bodega. Con parte de sus viñedos alrededor de edificio, estampa es un regalo para la vista. Es cierto que desde lejos, la primera impresión no es muy buena, yo, personalmente me esperaba más, pero si te paras a observar el paraje en el que se encuadra la cosa cambia.
Hablando de la bodega, es difícil dejar el edificio a un lado, puesto que tanto la bodega esta hecha pensando en el edificio, de la misma manera que el edificio esta hecho para la bodega. La primera visión es espectacular, con una gran cristalera que da a su sala de barricas, todas ellas ordenadas en forma de media luna, un verdadero espectáculo para la vista. Esta joven bodega, solo 11 años de vida, se caracteriza por su producción limitada de vinos, y la calidad de los mismos.
Tras enseñarnos sus instalaciones y su proceso de elaboración, subimos a su comedor, con unas vistas preciosas a sus viñedos a través del saliente edificio, realmente bonito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario